¡Aquí y ahora estoy contento! II

Durante este proyecto, gracias a la ayuda de las familias, hemos investigado si los animales podían sentir emociones al igual que nosotros.

Cada niño ha explicado a sus compañeros sus averiguaciones.

 

       

 

                   

Gracias a toda la información hemos concluido que los animales sí que pueden sentir emociones!!!Pueden estar contentos, tristes, asustados, pueden mostrar amor, ganas de jugar, hambre...

Escuchando una melodía muy suave hemos realizado una pequeña relajación; en la que algunos incluso, se han relajado tanto que alguno se que quedado un poquito dormido... 

Y después, hemos realizado un mural con la silueta del cuerpo, en la que hemos señalado las zonas del cuerpo en las que teníamos unas sensaciones especiales mientras realizamos la relajación.

Los Spoonkies nos han enviado un regalo, nos han traído un cojín muy especial, al que podemos abrazar cuando estemos tristes, enfadados... y que nos va a dar muchas energías para volver a sonreír y continuar aprendiendo.