El proyecto de Magia llegó a su fin pero antes de eso, como ya os comentamos en la entrada anterior, tuvimos que realizar diferentes pruebas que nos propuso el mago Ruperto.
Por ejemplo, para conseguir una de las letras, tuvimos que aprender varios trucos de magia que nos mandó en un vídeo.
Clavamos un clavo en una madera con un plátano. Vosotros creéis que puede ser cierto? Pues así es!
Realizamos magia al mezclar colores.
Incluso dimos vida a nuestros dibujos. ¡Mirad el vídeo para saber cómo hacerlo!
Tuvimos que acertar unas adivinanzas en pareja.
En otra ocasión construimos torres con cartas. Primero por parejas y luego en gran grupo.
A raíz de nuestras investigaciones añadimos nuevas palabras mágicas a nuestra chistera. ¡Cada una tiene un significado diferente!
Incluso, hemos traído material sobre magia para compartir en el aula con los demás compis.
Cuando por fin superamos todas las pruebas, obtuvimos nuestras 7 letras que al unirlas formaban la palabra DIPLOMA. Al principio no entendíamos muy bien a qué venía esa palabra pero al día siguiente lo descubrimos.
Apareció por sorpresa el Mago Ruperto. Quería conocernos en persona. Realizó algunos trucos de magia y por último nos entregó nuestro diplomas de aprendices de magos.
Ahora, terminado nuestro proyecto, lo que pensamos sobre la magia es lo siguiente:
Seguimos aprendiendo jugando.
¡Hasta pronto!
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