Esta semana, después de llevar a cabo las exposiciones, hemos trabajado en mayor profundidad sobre los temas investigados.
Por ejemplo, en el caso de los tipos de dientes: intentamos crear un pequeño rap.
Ahora ya sabemos que los incisivos son para cortar, los caninos para rasgar y los premolares y molares para masticar.
Además, dejamos patente nuestra sabiduría en una ficha impresa y en la que consistía en picar los tres tipos de dientes y colocarlos en el lugar que le correspondía.
En otra ocasión, leímos el cuento del Ratoncito Pérez... ¿Sabíais que este cuento nació como regalo para un futuro rey cuando se le cayó su primer diente?
Lo escribió el jesuita Luis Coloma, y se conserva tanto la tradición que podemos visitar en Madrid, la casa museo Ratón Pérez.
Averiguamos que en otras partes del planeta también hay seres mágicos que llevan regalos a los niños y niñas que les dejan su diente. En cada lugar se le llama de forma diferente, nos reímos mucho como suenan!
También visionamos un cuento que nos explicaba que los dientes de leche no son ni del mismo tamaño ni hay el mismo número que en una dentadura con dientes definitivos.
Y para hacer la comprobación, realizamos unas sumas para poder comprobarlo.
Terminamos la semana realizando una actividad complementaria. Se trató nada más y nada menos que de una salida para visitar una clínica dental de Pontedeume.
Gracias a ella reforzamos contenidos ya trabajados como el nombre de los dientes, quiénes son los profesionales que los cuidan, el número de dientes de leche y definitivos...Pero también hemos aprendido que debemos poner la cantidad de pasta de dientes como el tamaño de un guisante o que no nos podemos olvidar de limpiar también la lengua.
Queremos agradecer a la Clínica dental Amalia Núñez por abrirnos sus puertas y ofrecernos su tiempo. ¡Salimos encantados!
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